Llevo dormido mucho tiempo, reflexionando pequeñas y grades cosas, ideas, aprendiendo cada día más. El tiempo cada vez me aprisiona, gradualmente, en su vida, lo que hace que no tenga tiempo, salvo de esperar la aprobación de un letargo infinito. Sinceramente, no abandoné relativamente el blog por falta de gusto ni mucho menos, sino que había empezado ya una nueva etapa en mi vida. No implicaba que no escribiese más, sino que el tiempo ocupacional que tenía para dedicarle a la escritura, los trabajos y los diálogos, se ha ido extinguiendo poco a poco. Hoy, he entrado sin querer queriendo en la página, incluso por una equivocación - ya sea por lo que sea, pero alegrándome - de encontrarme con unas 4500 visitas y comentarios que han ido dejando personas y entes cambiantes, pensantes seres que gozan de saber y me encanta eso.
Dejé todo y la verdad, si que fue un poco la falta de inspiración, el estar con el eterno estrés preuniversitario y continuamente con el uso racional de matemáticas y químicas que quitan tiempo a filosofar sobre el lecho vital que se cierne sobre nosotros. Pero bueno, tras el alegato de inspiración de ver un crecimiento tanto personal como del blog, creo adiente el comenzar de nuevo con el blog.
Lo que ha sido en resumen este periodo de descanso literario-filosófico ha derivado en centrarme en la ilustración, que sumada al bachillerato científico se me ha hecho imposible encontrar la inspiración. Los números siguen rondando, pero ya por poco tiempo, en Abril ya se acaba el curso y tras selectividad un tétrico mundo que divaga desde la normativa clásica hasta la hermenéutica y el existencialismo Kierkegaardiano pasando por simbolismos y escrituras del Yo y acabando posiblemente en traspasar saberes, nociones y métodos a futuras mentes. Así pues, sintiendo en el alma mi ausencia y delirio de inspiración literaria, la motivación de ver que casi 5000 almas han leído - y espero que deleitado - todas las palabras brindadas entre el espacio y el tiempo, harán que vuelva pronto, con nuevos posts, diarios y vidas que contar, a almas que derivan de espejos y mundos de bosquejos.